Universidad Regional de Zinacatepec A.C.

 

Lic. en Agronomía

E-mail Imprimir PDF

El comienzo de la Agricultura se encuentra en el periodo Neolítico, cuando la economía de las sociedades humanas evolucionó desde la recolección, la caza y la pesca, a la agricultura y la ganadería. Las primeras plantas cultivadas fueron el trigo y la cebada. Sus orígenes se pierden en la prehistoria y su desarrollo se gesto en varias culturas que la practicaron de forma independiente, como las que surgieron en el denominado creciente fértil (zona de Oriente Próximo desde Mesopotamia al Antiguo Egipto), las culturas precolombinas de América Central, la cultura desarrollada por los chinos al este de Asia, etc. Se produce una transición, generalmente gradual, desde la economía de caza y recolección a la agrícola. Las razones del desarrollo de la agricultura pudieron ser debidas a cambios climáticos hacia temperaturas mas templadas; también pudieron deberse a la escasez de caza o alimentos, variedad de recolección, o a la desertización de amplias regiones. A pesar de sus ventajas, según algunos antropólogos, la agricultura significo una reducción en la dieta, creando un cambio en la evolución de la especie humana hacia individuos más vulnerables.


El Neoliberalismo a tenido un impacto mas fuerte en el campo en dos direcciones. Primero, donde las oportunidades del comercio exterior han llegado a crecer a ciertos grupos empresariales que incluso mantienen tasas de crecimiento del PBI Agrícola. Pero en contraste el campesinado y las comunidades indígenas han visto disminuir sus condiciones de vida y la pobreza, siendo la característica universal. El mercado laboral para los agrónomos dentro de las empresas el crecimiento es pequeño, por que son pocas y pagan mal.

En cambio, el mercado dentro de los grupos es grande pero no tienen poder monetario para pagar. Hay demanda potencial pero no real. Uno de los retos universitarios es: preparar gente que haga sociedad con estos grupos, y puedan generar proceso de desarrollo interno, desde donde las comunidades puedan sobrevivir y emerger como entidades productivas capaces de desarrollarse y sostenerse no solo a sí mismas, sino a los agrónomos como profesionistas asociados y comprometidos con ellos.


 
You are here: